lunes, 1 de abril de 2013

ÁQABA: recuerdos del Mar Rojo

Quienes me conocen saben que tengo algunos vicios (unos caros y otros carísimos) y una pasión.
Entre mis vicios confesables están comprar libros, viajar y hacer jabón.
Y mi pasión es EGIPTO. Ya estuve cuatro veces, y estoy deseando volver. Pero tal como está la situación... mejor me espero. Una pena, pero es lo que hay Ojos en blanco

En uno de los viajes tuve la ocasión de hacer una excursión estupenda: un laaaaaaaargo recorrido en 4X4 por el desierto del Sinaí, con paradita de rigor en una casa beduína para tomar un té, y después visitar dos parques naturales protegidos, Ras Abu Galum y Blue Hole, para hacer snorkel, vamos... lo de las gafas y el tubito de toda la vida   :lol:

El desierto del Sinaí es un lugar pedregoso, duro, inhóspito... pero bonito como pocos. Te bajas del coche, te plantas en medio de una inmensa nada de montañas, rocas y wadis (cauces secos de antiguos ríos), y te das cuenta de lo pequeño que eres.

Estuvimos casi una hora recorriendo diferentes pistas y wadis. Luego estuvimos haciendo snorkel en el Parque Natural Ras Abu Galum antes de comer una comida típica en unas jaimas beduínas.
Descansamos un rato y a continuación recorrimos 7 Km en camello, por la orilla del Golfo de Áqaba, hasta llegar al otro punto de buceo / snorkel, el Parque Natural Blue Hole (Agujero Azul), en la localidad de Dahab. Es una impresionante laguna de coral que se conecta con el mar. Tiene un segundo nombre, mucho menos agradable: el cementerio de los buceadores. Más de 100 submarinistas no han logrado subir a la superficie, por lo que es uno de los lugares de buceo más peligrosos del mundo. Una vez pasados los 60 metros de profundidad, el nitrógeno empieza a hacer de las suyas y los buceadores se desorientan y siguen descendiendo en lugar de ascender. Pero tranquilidad, que hacer snorkel no es peligroso, eh!

Fue una excursión estupenda. Los compañeros de viaje, fantásticos. Nos reímos mucho, sobre todo durante los 7 Km en camello  :lol:

De ella, como de todo el viaje, tengo muy buenos recuerdos, además de fotos, claro. Pero hay una imagen que tengo grabada en la memoria: al final de una pista entre montañas está la playa del Parque Ras Abu Galum, en pleno Golfo de Áqaba. La visión del Mar Rojo con un montón de tonos azules diferentes y las montañas de Arabia Saudí adivinándose en la otra orilla, es algo que no olvidaré jamás. Fue un momento tan hermoso que durante unos minutos me quedé sin palabras... y mira que es difícil callarme!!

Del recuerdo de esa imagen nació este jabón: Áqaba. Está hecho con aceites de oliva, coco y palma, mantecas de cerdo y karité y cera de abejas. Está enriquecido con aceite de semilla de uva, para suavizar la piel. Lleva aceites esenciales de naranja y lavandín, y fragancia de musk.


Aquí están las pastillas recién cortadas

Intenté, sin lograrlo, reflejar los distintos tonos de azul del Mar Rojo, y las montañas de la otra orilla. El  aceite de oliva virgen extra (verde intenso) me la jugó claramente con el óxido mineral azul Ojos en blanco


Y aquí con su sello, hecho para la ocasión

Tendré que repetirlo en otra ocasión, a ver si hay más suerte con el color.
Espero que os guste!
Besos y feliz semana!! Sonrisa